13 de diciembre, 2021
Conversación con el Dr. David Moreno Mateos, Assistant Professor en el Departamento de Arquitectura de Paisajes en la Graduate School of Design y en el Departamento de Biología Organísmica y Evolutiva de la Universidad de Harvard.
Deforestación en el Amazonas (Brasil) Fuente: The Guardian
Elena Bouldin: Muchas gracias por aceptar hablar conmigo. Quería preguntarle sobre su investigación ya que, obviamente, la restauración de ecosistemas es fundamental en estos momentos. Cuando estudia la salud de un ecosistema, ¿qué variables estudia? ¿En qué aspectos del ecosistema se centra? Lo digo porque evidentemente estudiar todo el ecosistema sería muy complicado, no pueden medirlo todo.
Dr. Moreno Mateos: Pues esa es una muy buena pregunta. Una de las grandes cuestiones que en ecología intentamos entender es cómo medir el cambio en los ecosistemas. Cualquier tipo de cambio. En este caso, específicamente, el cambio, primero, generado por el desarrollo humano para cualquier actividad económica que implique la degradación de naturaleza. Y por otro lado, cómo medir el cambio en el proceso de recuperación. Ese es un aspecto de los más difíciles, porque realmente lo que medimos son cosas muy sencillas, que no son representativas de lo que es un ecosistema. Por ejemplo, la biodiversidad, o el carbono en el suelo, o cosas así, son abstracciones muy, muy, muy básicas de lo que realmente implica la complejidad de los ecosistemas. Entonces, las cosas que yo intento hacer, y a las que ahora estoy dedicando más atención, son precisamente cómo medir el cambio en ecosistemas, siempre orientado a la parte de recuperación, pero de alguna manera capturando la complejidad del ecosistema. Por eso miramos un poco las interacciones entre las plantas, los microbios del suelo... Y cómo éstas se expanden a las funciones de los ecosistemas. Todo ello, de alguna manera, captura un poquito más de la complejidad en los ecosistemas, pero realmente sigue siendo una simplificación, porque tú piensa que el ecosistema es todo: tienes árboles, plantas, insectos, pájaros, mamíferos, microbios del suelo, que son hongos, bacterias, y luego micro invertebrados, nematodos... Todo está interactuando. Cada uno de esos organismos está interactuando con otro. Y entonces tú llegas a un bosque, lo cortas y lo conviertes en un maizal y todo eso desaparece por completo. Todo. Y estamos hablando de miles y miles, por no decir decenas de miles de interacciones, porque realmente no está muy claro cuántas hay. Y las destruyes en un día, sin realmente saber ni siquiera cuánto tiempo va a tardar en recuperarse eso otra vez. El lugar nunca va a volver a ser igual, pero al menos llegar a algo parecido a lo que tenías originalmente, de similar complejidad, de similar funcionalidad.
Intentas buscar de alguna manera aquellas medidas que te den una idea de la complejidad del sistema. Yo, en concreto, me he centrado en las interacciones entre las plantas y los microorganismos del suelo, que espero expandir a otros tipos de interacciones. Pero estoy un poco metido ahí, porque si tú estás midiendo toda una comunidad de plantas en un ecosistema que no sea muy complicado, ¿con cuántos microorganismos puedes identificar interacciones? Estamos hablando de cientos de interacciones posibles en un simple bosque de aquí de New England, que no son de los más diversos del mundo, pero que son mucho más diversos que los de España en la mayoría de los casos. Pero bueno, el caso es que por lo menos es una pequeña aproximación, muy simple, pero un poquito menos simple que las aproximaciones típicas de las especies que hay, lo que se llama composición de especies o diversidad.
Los ecosistemas tienen complejas redes de interacciones
Elena Bouldin: Claro, las plantas están en la base de las cadenas tróficas y de la biomasa. Tiene sentido estudiar primero eso, porque a partir de ellas sale todo lo demás, ¿no?
Dr. Moreno Mateos:s Sí. Una de las razones de elegir ese tipo de interacciones es que uno de los componentes estructurales, y funcionales, más importantes, de los ecosistemas son las plantas, así que centrarse en eso y ver cómo se expande hacia arriba, con pájaros e insectos, y hacia abajo, con hongos y bacterias, por ejemplo, es un poco la idea de todo esto. Ir expandiendo, en la medida que se pueda.
Elena Bouldin: ¿Cómo estudia exactamente esas relaciones con las plantas? Supongo que coge muestras del suelo y las estudia químicamente, pero no sé qué otras cosas hace.
Dr. Moreno Mateos: Pues en concreto, para este tipo de aproximaciones que estamos buscando de las interacciones entre las plantas y los microorganismos del suelo, lo que hacemos es coger muestras del suelo, como tú dices, y en esas muestras de suelo buscamos las raíces de los árboles que hay. Entonces de lo que se trata es de identificar qué organismos están interactuando con los árboles a través de las raíces. Buscamos los diferentes tipos de hongos que están interactuando con los árboles, que pueden ser hongos micorrizas, y luego otros tipos de hongos endófitos, que viven dentro de las raíces, o mico parásitos, que son hongos que parasitan hongos, todo ello para ir complejizando esa red. Y también buscamos las interacciones con bacterias, por ejemplo, bacterias que se comen a los hongos, o bacterias que afectan al árbol de alguna manera determinada como patógenos, por ejemplo, y ese tipo de funciones. Entonces cogemos esa muestra de suelo, sacamos las raíces, y las secuenciamos. Y al secuenciar esa raíz, tú puedes sacar el ADN de todos los organismos presentes, bien dentro de la raíz o bien en lo que se llama la rizosfera, que es el entorno de la raíz, justamente pegando a la raíz, de tal manera que dices, esta bacteria está interactuando con el árbol. Ése sería un primer paso. Lo ideal sería identificar cuál es el papel de esa interacción a lo largo del tiempo. Pero eso es mucho más difícil porque, realmente, individualizar las interacciones no es fácil. No es fácil determinar que esta bacteria está haciendo esto con este árbol. Eso es más complicado. De momento estamos viendo la imagen general de cómo es la estructura de las interacciones, para poco a poco ir entendiendo qué efecto tienen esas interacciones sobre el ecosistema.
Hongos micorrizas y bacterias existen en la tierra y las raíces Fuente: Frontiers
Elena Bouldin: En su página web, donde habla usted de su investigación, menciona que combina la investigación empírica con el meta análisis. ¿Qué es el meta análisis? o ¿Qué requiere?
Dr. Moreno Mateos: Un meta análisis básicamente es una manera de recoger información sobre un tema que tú crees que es importante, a partir de muchísimos estudios. Lo que haces es sintetizar toda esa información y ver cuáles son los patrones generales en la respuesta a tu pregunta. Por ejemplo, lo que hemos hecho para nuestro meta análisis es buscar respuesta a la pregunta siguiente: ¿Se recuperan los ecosistemas de forma diferente si estás mirando la diversidad o el ciclo del carbono?
Entonces quieres ver si se recuperan antes o después, si hay alguna diferencia. Entonces en algunos meta análisis que estamos haciendo ahora, por ejemplo, estamos estudiando eso a lo largo del tiempo. Escogemos estudios de un montón de sitios geográficamente diferentes, sacamos los datos, y los metemos en una base de datos común y vemos el comportamiento de esos datos de una forma mucho más global. Porque una cosa es que te encuentres, por ejemplo, que los bosques acumulan mucho carbono en Malasia y otra cosa es que te encuentres que los bosques de Malasia, junto con los de Vietnam, Sudáfrica y Brasil, están acumulando mucho carbono. Son cosas muy diferentes. El meta análisis lo que hace es recopilar información de muchos sitios, juntarla, y construir una base de datos única que te da una visión más general de las preguntas que estás haciendo. Por ejemplo, puede decir, vale este proceso que está ocurriendo en Malasia, estamos viendo que realmente ocurre a escala global, por lo menos en los muchos estudios de los que nosotros hemos recopilado información. Con el meta análisis, lo que haces es dar respuestas más globales a procesos que se han estudiado de forma más local.
Elena Bouldin: Entonces usted pasa muchísimo tiempo estudiando otros estudios y haciendo conexiones entre todos esos estudios!
Dr. Moreno Mateos: Sí, eso es un meta análisis. Pero tampoco es que pase muchísimo tiempo, paso una cantidad determinada de tiempo. Sí, he pasado muchísimo tiempo en el pasado. La verdad es que cuando estaba haciendo mi post doc en Stanford y en Berkeley pasé muchísimo tiempo con esto y era un aburrimiento infinito. Esto de estar buscando datos en los estudios de otros es un aburrimiento mortal! Pero, la realidad es que, cuando encuentras esos patrones generales, es muy gratificante, porque dices, ostras, es que esto es muy interesante.
Pero ahora hacemos mucho trabajo de campo. Seguimos haciendo meta análisis análisis, de hecho, estamos trabajando en dos diferentes, en estos momentos. Pero también hacemos mucho trabajo de campo, porque una de las cosas buenas de hacer meta análisis, es que dices, vale, la tendencia general parece que es esta, y una vez que entiendes eso, empiezas a entender un poco el proceso en general, y la primera pregunta que te viene es: ¿Y esto por qué está pasando? Y eso me ayuda mucho a la hora de definir proyectos empíricos de ir al campo a coger datos y suelos para entender por qué esos procesos generales que has identificado en el meta análisis están pasando. Es como una secuencia lógica del trabajo, pero bueno, a mí lo que más me gusta es hacer trabajo de campo, eso te lo digo así porque yo siempre quise ir al campo. A mí me gustaba el campo desde que era muy pequeño y me sigue gustando.
Fuente: AidGrade.org
Elena Bouldin: ¡Lo entiendo perfectamente porque yo soy igual! Ahora, mientras lo escuchaba, se me ha ocurrido que a lo mejor se podría encontrar una manera de automatizar ese meta análisis que tantas horas de trabajo requiere. ¿Cree que es posible hacer una especie de automatización, desarrollando un programa, o algo con inteligencia artificial, para identificar esos procesos o tendencias comunes en los estudios?
Dr. Moreno Mateos: Bueno, no sé muy bien. ¡Me haces unas preguntas estupendas! Son las mismas preguntas que me he hecho yo también. Me encantaría que existiese, pero no existe de momento porque no puedes definir claramente unos parámetros muy concretos de búsqueda, aunque tú los tengas muy claros en tu mente. A nivel de algoritmo no es una cosa ni mucho menos evidente. Imagino que con el paso del tiempo sí se podría hacer. Y sí que he visto algunas aproximaciones que han hecho cosas parecidas, pero en aspectos mucho más concretos. Es decir, que buscas un tipo de dato muy, muy concreto, y uno único. Sí, he visto gente que ha utilizado algoritmos de inteligencia artificial, que en realidad no es inteligencia artificial sino "machine learning", que es un nivel, digamos, menor de complejidad, ya que no son algoritmos que aprenden sobre sí mismos y van mejorando, sino que son algoritmos estáticos que sí, tienen cierta capacidad de mejora, pero no es inteligencia artificial. En fin, sí, lo he visto alguna vez, pero para cosas muy concretas. Sería genial. De hecho yo, cuando empecé con meta análisis pensé, "¡si pudiera meter ahí todas las bases de datos y que un algoritmo me dijera cuáles son los buenos!" Pero de momento lo que hacemos es dedicar horas y horas, bueno, meses, a todo este tipo de cosas para sacar los resultados.
Elena Bouldin: Bueno, quizá en un futuro no tan lejano se pueda hacer. Hace poco estuve hablando con un profesor de aquí de Berkeley, no sé si lo conoce, se llama Todd Dawson.
Dr. Moreno Mateos: Sí, sí, lo conozco. Yo estuve en Berkeley tres años.
Elena Bouldin: Sí, lo sé. Lo leí en algún lado, por eso he pensado que a lo mejor lo conocía. Bueno, pues hablé con él...
Dr. Moreno Mateos: Él es el que hace eco fisiología en árboles.
Elena Bouldin: Sí, exacto. Pues él me contó que, antes, para medir todos los parámetros que tienen que medir en los árboles, iban al bosque, trepaban a los árboles uno a uno, y claro, tomaba muchísimo tiempo. Y ahora eso lo pueden hacer con drones. A veces todavía trepan, pero los drones son mucho más rápidos y además pueden analizar muchos más árboles en mucho menos tiempo. Así que, bueno, nunca se sabe. A veces la tecnología ayuda mucho y cambia radicalmente nuestra manera de operar.
Dr. Moreno Mateos: Sí, sí, ayuda mucho. Nosotros no hemos encontrado un algoritmo de inteligencia artificial que nos permita hacer esto, pero por ejemplo, el tema de la genómica tal como se ha desarrollado es una explosión de información que antes era impensable. Ahora puedes secuenciar básicamente todos los microorganismos del suelo con unas pocas muestras de unas redes de interacción brutales, súper fácilmente construidas. Hay muchas cosas para mejorar todavía, es cierto, pero eso ha sido un cambio brutal que ha permitido entender un poco la complejidad de las cosas. O sea que sí, la tecnología es imprescindible, hay que intentar estar siempre lo máximo al día con la tecnología para sacar la mejor información posible en ciencia.
Elena Bouldin: Otra pregunta, un poco diferente. Entiendo yo que usted estudia tanto ecosistemas terrestres como acuáticos. ¿En qué se diferencian los estudios de recuperación de esos ecosistemas? ¿Qué se mide en cada tipo de medio?
Un ecosistema acuático
Dr. Moreno Mateos: Es diferente uno de otro porque no se pueden mirar las mismas cosas. Si yo estoy interesado en las interacciones entre organismos, por ejemplo, de plantas y microorganismos del suelo, eso sí lo puedo hacer en un ecosistema terrestre, entre comillas, más fácilmente que en un ecosistema acuático, porque la interacción entre las plantas en los humedales, por ejemplo, es mucho menos importante. Ahí el crecimiento de las plantas está impulsado por el tipo de agua que hay, el periodo de residencia del agua en los humedales, la concentración de nutrientes que hay en el agua, y ese tipo de cosas. Los hongos micorrízicos, por ejemplo, no existen en el agua. O sea que realmente no hay organismos que interaccionen tan intensamente con las plantas que están en un humedal, como con las plantas que están en ecosistemas terrestres. Por lo menos no está muy claro todavía. Para empezar a entender la recuperación de la complejidad de esos sistemas acuáticos, tendrías que mirar a otro tipo de organismos. Por ejemplo, los ecosistemas acuáticos tienen unas redes de interacción muy complejas en el agua y como todos los microinvertebrados, macroinvertebrados que viven en el agua montan esas cadenas tróficas tan complicadas, con organismos con zooplancton más grande, con pececillos que se los comen, larvas, insectos, y todo eso, toda esa complejidad tan grande que hay en el agua no existe en los ecosistemas terrestres, porque en el aire no hay toda esa complejidad. O sea que sí, tendrías que mirar a otras redes de interacción diferentes, para entender esa complejidad.
Elena Bouldin: Claro, tiene sentido. Luego también le quería preguntar: un ecosistema que ha sido impactado por la minería es muy diferente de un ecosistema que ha sido impactado por la deforestación, supongo. Obviamente, también existen otros factores, pero, así en general, ¿ha encontrado diferencias en el tiempo necesario para la recuperación de ecosistemas afectados por la minería comparados con los ecosistemas afectados por la deforestación? ¿Hay alguna manera de cuantificar esos impactos?
Dr. Moreno Mateos: Eso sería genial. Lo que pasa es que necesitamos muchos datos y aún no hemos sido capaces de obtener tantos datos como para para poder cuantificar eso. Pero sí hemos visto pequeños patrones, es decir, está claro que si una zona está afectada por minería, la recuperación es diferente, que si está afectada por el logging, o sea, por la extracción de madera; hemos comparado la agricultura con la extracción de madera o logging, y sí, hemos encontrado ciertas diferencias. Por ejemplo, en un meta-anlálisis que estamos terminando ahora, encontramos que las zonas que estaban afectadas por la agricultura se recuperaban mejor que las zonas que estaban afectadas por el logging, sorprendentemente. Parece que tendría que ser lo contrario, pero para los parámetros que vimos antes, que eran bastante sencillitos, como diversidad, carbono, ciclo de carbono y cosas así, bueno, ni siquiera eso, era carbono en el suelo. Y eso sí que nos permitió ver que el efecto de la agricultura en la recuperación era más positivo que el efecto del logging, por alguna razón. Algo que realmente no tenemos muy claro, porque lo que uno piensa es un poco lo contrario. Pero parece ser que el efecto de tener más nitrógeno acelera los procesos de recuperación y hace que por lo menos estos parámetros tan sencillos se recuperen más rápido. Pero, vamos, hicimos un estudio en el que evaluamos 8 impactos intentando ver diferencias en esos 8 impactos en la recuperación y realmente no fuimos capaces de encontrar diferencias muy claras. Pero tiene que haberlas. Es que nunca se ha hecho una base de datos con suficientes datos, de hecho, para para poder probar este tipo de cosas. Pero vamos, sí es la idea. La idea es intentar ver qué efectos hay, y de hecho en el meta-análisis que estamos haciendo estamos comparando esos dos: el logging y la agricultura en bosques, que son los dos impactos más importantes que hay en bosques.
Tierra deforestada para uso agrícola Fuente: The Guardian
Elena Bouldin: Si se empieza a hacer agricultura regenerativa, ¿eso se puede considerar una restauración parcial del ecosistema?
Dr. Moreno Mateos: La agricultura regenerativa tiene cosas que son mucho mejores que la agricultura intensiva convencional, claramente. Entonces no sería una restauración en el sentido estricto, pero sí que es una recuperación de ciertos procesos de los ecosistemas que están perdidos en la agricultura convencional. Yo creo que la agricultura regenerativa es una idea estupenda, siempre y cuando permita tener la producción suficiente para que la gente no se muera de hambre.
Una de las tendencias que favorecen la conservación de la naturaleza es la ultraintensificación de la agricultura, aunque parezca contradictorio. Porque si tu intensificas mucho la agricultura y haces pequeñas zonas súper productivas, siempre y cuando controles la contaminación que sale de esas zonas, estás dejando muchas zonas libres para la conservación de la naturaleza y la restauración. Digamos que pones todo el impacto en zonas más pequeñas. Entonces, es complicado. No hay una respuesta evidente a eso, porque sí, la agricultura regenerativa, igual que la agricultura orgánica, están fenomenal. Pero requieren grandes superficies de tierra.
Elena Bouldin: Pero si concentras la agricultura y la haces muy intensiva solo en ciertos espacios, el suelo se va a degradar tanto que va a llegar un momento en que no lo vas a poder utilizar y vas a tener que ir a otro sitio...
Dr. Moreno Mateos: No, claro, porque la agricultura ultraintensiva tiene que vivir con esto. Tú tienes que vivir sabiendo que ese mismo trozo de tierra va a ser el mismo trozo de tierra para siempre. No puedes decir vale, como este se ha hecho una mierda pues vamos a otro lado. No. La agricultura intensiva de la que yo estoy hablando es un tipo de agricultura que no se mueve. Tú desarrollas una tecnología que permita un crecimiento constante en el sitio con herramientas tecnológicas. Por ejemplo, está el tipo de agricultura de los pimientos en Holanda. Entonces tienen esas granjas de pimientos con una productividad como 15 o 20 veces mayor que la productividad del crecimiento de los pimientos normales que se hace en España. Es decir, es ultra intensiva porque todo es en invernaderos, todo es artificial, tiene un "input" energético muy grande, pero la huella a nivel de área es minúscula comparada con la agricultura convencional. Entonces, si tú consigues mantener esos invernaderos con energías renovables en vez de con petróleo para calentarlos en invierno y todos los pesticidas que utilizas y los fertilizantes que pones son orgánicos, y hay un reciclado de todo ese producto, entonces ese es el sistema, ideal entre comillas. Es ultra intensivo, pero necesitas muchísima menos tierra y si lo haces de forma sostenible es la agricultura perfecta. Ciertamente eso no se puede aplicar para todos los cultivos. Hay ciertas cosas, como el trigo, que no puedes tener en ultra intensivo porque ahí lo que tienes son estanterías. De hecho, realmente el suelo no lo tocas. En la mayor parte de los casos. Tú tienes diferentes estratos, que muchas veces es agua simplemente, y tienes estanterías en las que crecen los pimientos, los tomates, las judías, todo. Pero el trigo no lo puedes tener en estanterías. Entonces, bueno, pues es lo de siempre.
Cultivo de pimientos rojos en un invernadero de los Países Bajos Fuente: FreshPlaza
Dr. Moreno Mateos: ¿Queremos depender de las soluciones tecnológicas para todo? Pues no lo sé. A nivel de conservación de la naturaleza es mucho mejor hacer eso, sinceramente, porque, claro, dejas muchísima zona libre para que los elefantes vuelvan a pasear por el mundo y todo ese tipo de cosas. Pero estás dependiendo de sistemas muy intensivos que podrían ser potencialmente más vulnerables a, por ejemplo, plagas resistentes. Imagínate que una plaga de pimientos resistente empieza a afectar a todos los invernaderos del mundo. Entonces estás un poco fregado, pero es verdad que también puedes sacar tecnologías para eso, porque si tú detectas una plaga resistente, lo bueno de los invernaderos es que son sistemas cerrados. Tú puedes cerrar el invernadero y la plaga no va a entrar, a no ser que tú la metas. Entonces, si controla la procedencia de las semillas, etc, esas plagas se pueden controlar en gran medida, pero siempre puedo aparecer una que no, tipo hongos, que los hongos son tremendamente móviles.
Son cuestiones un poco filosóficas, a veces, pero que realmente están pasando ahora mismo. O sea, realmente la ultraintensificación está pasando y ha pasado ya muchos años. En España, por ejemplo, existe en todo el sureste. Hay grandes sistemas mega productivos que utilizan una cantidad de tierra minúscula y tienen una productividad brutal.
Es complicado. Por eso te digo que la agricultura regenerativa, está genial, sí, en principio. Conceptualmente suena como el paraíso, pero la agricultura regenerativa necesita mucha tierra y eso para la conservación de la naturaleza no es muy positivo.
Elena Bouldin: Ya, es verdad. No lo había pensado así.
Dr. Moreno Mateos: Es complicado. Todo tiene un precio. Nada es gratis, entonces hay que pensar cuáles son las consecuencias de las de las posibles acciones que podamos llevar a cabo. Es igual que la energía nuclear. ¿La energía nuclear es muy peligrosa? Pues sinceramente, en la actualidad no es muy peligrosa porque dispone de múltiples sistemas de seguridad. La gente tiene un miedo un poco irracional en base a determinados accidentes que han ocurrido en la historia, pero que ya no pueden pasar.
Elena Bouldin: Sí, y en comparación con otras tiene mucho menos impacto, verdad?
Dr. Moreno Mateos: Claro, entonces, a día de hoy yo pienso que, hasta que se resuelva el tema energético a nivel global con energías mega productivas como puede ser la de fusión, ésta es la mejor solución durante una temporada. No es que me guste mucho hipotecar ciertas partes del mundo con residuos radioactivos, pero pienso que hoy por hoy es mucho mejor eso que seguir quemando petróleo.
Elena Bouldin: La última cosa que le quería preguntar era sobre la arquitectura del paisaje. ¿Usted determina lo que es necesario para recuperar un ecosistema específico y dice, bueno, pues aquí vamos a hacer esto y lo otro? ¡No estoy segura de entender lo que hace un arquitecto de paisaje!
Dr. Moreno Mateos: La realidad es que yo no soy arquitecto del paisaje! Yo soy ecólogo, yo soy científico. Lo que pasa es que a mí me contrataron en el Departamento de Arquitectura del Paisaje, porque hay un enorme interés por integrar la ecología en la arquitectura del paisaje y desarrollar más la restauración de ecosistemas. Aquí en Estados Unidos por lo menos, el papel de los arquitectos del paisaje en la restauración es cada vez más importante. Siempre, o en la gran parte de los casos, cuando hay proyectos de restauración, hay detrás arquitectos del paisaje. El departamento ya ha visto desde hace tiempo la importancia de considerar la ecología a nivel un poco más profundo en la arquitectura del paisaje y reforzar el papel de la restauración, por eso me trajeron aquí. Pero yo realmente cuando llegué aquí no tenía casi ningún conocimiento de la arquitectura del paisaje. He aprendido muchísimo en estos dos años y ya entiendo un poco más del potencial que tiene en todo esto, que es enorme.
Harvard Graduate School of Design Fuente: Harvard GSD
Dr. Moreno Mateos: La arquitectura del paisaje es una disciplina que trabaja a una escala a la que no trabaja ninguna otra disciplina. Estás tratando con zonas grandes en las que tienes que considerar un montón de diferentes perspectivas, pues trabajas con ecología, trabajas con el suelo, trabajas con las plantas, trabajas con la gente, trabajas con el espacio, trabajas con las ciudades. Son un montón de factores. Su papel es tremendamente importante, y el departamento lo ha entendido. Entonces, mi papel aquí es seguir haciendo mi investigación pero, a nivel de enseñar a los chicos, tengo que enseñarles a entender la importancia de la ecología en la planificación urbanística y el diseño de paisaje. Mi rol es mostrarles cómo integrar la ecología en todas las etapas de los procesos de decisión de estos proyectos y, por otro lado, recalcarles la importancia de la restauración en el contexto de la arquitectura del paisaje. Es verdad que la mayor parte de mis estudiantes son arquitectos de paisaje, pero también tengo estudiantes de biología que están interesados en temas de conservación. Entonces yo por ejemplo, doy una clase que se llama Restauración de ecosistemas, que empieza en el semestre de Primavera y ahí tengo de todo: tengo estudiantes de arquitectura del paisaje, de biología, y también de otros campos. He tenido chicos de historia, de política, de todo tipo, porque es una cosa que cada vez le interesa más a la gente. Ese curso está siempre a tope total.
Elena Bouldin: Suena muy interesante. Me leí la descripción y la verdad es que me gustó mucho.
Dr. Moreno Mateos: Ah, la leíste, vale.
Elena Bouldin: Bueno, sé que ya llevamos mucho tiempo y seguramente tienes mucho trabajo. No quiero abusar de tu amabilidad.
Dr. Moreno Mateos: No, si me ha encantado hablar contigo!
Elena Bouldin: Gracias. Ha sido muy interesante para mí.
Dr. Moreno Mateos: Me alegro. Si tienes cualquier otra pregunta, me dices.
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